Nuestra generación aportará un enfoque moderno de cómo se llevará a cabo la forma de hacer negocios

Hablamos con Alexandra Worth, de Op de Beeck & Worth Correduría de Seguros

 

Cuéntanos la historia de la correduría, la historia profesional de tu familia. Porque tú eres la segunda generación, ¿verdad?

La Correduría de Seguros Op de Beeck & Worth nació fruto de la unión de dos profesionales dentro del mundo de la mediación de seguros en Marbella. Sus inicios se remontan a 1977 cuando Patrick Op de Beeck abrió una Agencia con Plus Ultra. El otro socio, Danni Worth (mi padre) nació en Londres, y después de trabajar en un Lloyd’s Broker en Londres aterrizo en Marbella en 1989. Después de varios años como colaborador de una correduría internacional llega a un acuerdo con Patrick Op de Beeck en 2005 y fusionan los dos negocios, creando Op de Beeck & Worth Correduría de Seguros, siendo hoy día un referente a nivel nacional en seguros para el colectivo de extranjeros en España, así como en Grandes Patrimonios.

¿Cómo decides dedicarte a esta profesión e incorporarte a la correduría familiar?

Empecé mi vida laboral en una empresa de inversiones, promotora y operadora inmobiliaria integrada con sede en Madrid. Trabajé allí dos años y medio hasta que mi padre me propuso ir a trabajar con él, y aquí llevo 12 meses. Lo vi como una oportunidad única y fascinante y una cierta obligación moral de continuar a desarrollar la empresa de mi padre, que lleva gran parte de su vida creando. De una forma u otra, Op de Beeck & Worth siempre ha formado parte de mi vida y me gustaría que continuase así.

¿Cómo te formaste para trabajar en la correduría?

Estuve seis años en un colegio internado en el norte de Inglaterra llamado Ampleforth College. La escuela me enseñó desde muy joven a ser independiente y la importancia de construir relaciones sólidas con la gente, ya que pasé toda mi vida adolescente viviendo con personas que no eran mi familia. Después del colegio, tuve 5 ofertas para estudiar en universidades de Inglaterra la carrera de Inmobiliaria comercial, pero la universidad nunca me atrajo, siempre he sido más de aprender sobre la marcha. Este pasado día 9 de mayo aprobé el examen de Nivel II a través de Cojebro. En octubre empezaré con la formación del Nivel I para obtener el título que me permita ejercer como directora de una correduría. Además de estos requisitos, estoy haciendo otros cursos con compañías de seguros para tener conocimientos más profundos de cada ramo en el que operamos. Hace unos meses me uní a Cojebro Junior, lo que me ha dado la oportunidad de conocer a hijos de los miembros de esta asociación donde podemos compartir nuestras experiencias y apoyarnos mutuamente. Estoy muy ilusionada de formar parte de esta asociación y ver todo lo que ofrece en cuanto a las relaciones que se establecen, los cursos que ofrecen y los contenidos tan útiles a los que tenemos acceso para seguir conociendo e informándonos de las novedades del mercado.

¿Qué es lo que más te atrae de tu trabajo en la correduría?

El sector asegurador desempeña un papel fundamental en nuestra sociedad, ya que contribuye a estabilizar la economía. No hay dos días iguales trabajando en seguros, y cada cliente es un mundo diferente. El sector asegurador tiene una gran ventaja desde mi punto de vista, y es que es un sector muy social, donde se crean vínculos con las personas, ya sea con las compañías o los clientes. Es un negocio donde se vende un producto intangible. Vendes confianza a un cliente a cambio de una prima y aunque esto puede resultar difícil, también es muy gratificante. La mayoría de negocio que capta uno en la correduría no se hace sentado detrás de una mesa. Siempre me han encantado e interesado las relaciones con personas, y por eso me atrae este negocio. Además, es un sector que se tiene que adaptar constantemente a los cambios tan rápidos que estamos viviendo. Un ejemplo de estos cambios es que podemos observar como el mapa de riesgo a cambiado; en el S.XX nos preocupamos más de los riesgos de incendio y daños materiales, mientras que hoy en día, en el S.XXI estamos muy preocupados con nuevas amenazas y riesgos como son los temas de privacidad, datos y sobre todo los riesgos Cyber y RC.

¿Qué crees que puede aportar tu generación al sector?

Mi generación es la conexión con el futuro. Vivimos la cuarta revolución industrial y estamos acostumbrados a crecer rodeados de tecnología. Mi padre me habla de la época en que llevaba un maletín en el que guardaba su teléfono, y eso me suena tan extraño, aunque no haya pasado tanto tiempo, pero refuerza el factor de la rapidez con el que ha evolucionado la tecnología desde que era pequeña (¡sólo tengo 22 años!). Nuestra generación aportará un enfoque moderno de cómo se llevará a cabo la forma de hacer negocios, ya que hemos crecido con una mentalidad diferente a la de nuestros padres. Dicho esto, siempre sin perder de vista lo bueno del pasado, como son las relaciones personales.

¿Cómo se está adaptando vuestra correduría a los cambios tecnológicos?

Nuestra correduría se está adaptando a los cambios tecnológicos más lentamente de lo que nos gustaría. Llevamos muchos años con nuestra página web que sigue generando muchos clientes potenciales. Estamos trabajando con la plataforma Elevia que, tras un comienzo difícil, parece haberse incorporado considerablemente bien a nuestro negocio. Además, estamos plenamente conectados con los sistemas de EIAC y CIMA que confiamos que con el tiempo nos irán descargando de algunas tareas administrativas. Nuestro próximo objetivo será digitalizar completamente un producto para que nuestro cliente se pueda “auto servir” – quizás con algún ramo sencillo, como podría ser el seguro de viaje, mascota o similar. Mientras que somos conscientes de la importancia que tiene la tecnología en nuestro sector, también tenemos clarísimo que sigue habiendo clientes que prefieren un trato personalizado, y nunca perderemos ese valor añadido que tiene dar ese servicio, asesorando a cada cliente en función de sus necesidades y exigencias.

Sobre el autor