Las relaciones internas y externas deben fundamentarse en el respeto, la transparencia y la honestidad.
Luis Mena, socio de Mena Asesores
¿Cuál es la filosofía de empresa de Mena Asesores?
La filosofía de empresa de Mena Asesores está enfocada a la búsqueda de la excelencia desde una atención personalizada dirigida a satisfacer las necesidades y superar las expectativas de nuestros clientes, que nos permita construir relaciones duraderas con ellos, nuestros socios, nuestros empleados y nuestros proveedores y para ello nos esforzamos en generar un ambiente de confianza destinado a crear un fuerte vínculo de pertenencia entre todas las partes. Reconocemos, valoramos y apoyamos el desarrollo del potencial de nuestro equipo, otorgando confianza y transparencia al actuar de manera honesta.
La visión a largo plazo la consideramos un valor intangible fundamental de nuestros activos y un elemento intrínsecamente ligado a nuestros compromisos con los clientes, con la calidad del empleo de nuestro equipo y con la sostenibilidad, e intentamos devolver a la sociedad aquello que recibimos de ella.
Como empresa familiar, ¿qué valores transmiten a las nuevas generaciones?
Transmitimos a las nuevas generaciones que el negocio familiar principalmente debe tener alma y para ello sus lideres deberán tener presente que todas sus actuaciones deben estar presididas por una cultura de esfuerzo que implica sacrificio, generosidad, disciplina, respeto y la responsabilidad de velar por todos los elementos integrantes de la empresa.
Las relaciones internas y externas deben fundamentarse en el respeto, la transparencia y la honestidad, y lo que se piensa, se dice o se hace deberá procurarse que sea beneficioso para todas las partes.
Liderar una organización no es fácil y si además es una empresa familiar puede ser todavía más complicado. En ocasiones es necesario plantear decisiones en las que todos los socios no siempre tenemos porque estar de acuerdo a la hora de asumir determinadas iniciativas, y es entonces cuando el líder debe esforzarse por encontrar puntos en común en busca de un consenso dirigido a la consecución del interés general.
Actualmente, ¿cuáles son los principales retos que motivan al equipo de la correduría?
Actualmente, en Mena Asesores, nos encontramos inmersos en un proceso de relevo generacional que hemos planteado en un horizonte temporal de cinco años y que supone un gran reto en un momento de extraordinarios cambios. Pienso que cada nueva generación, destinada a asumir la gestión de la empresa familiar, debe intraemprender desarrollando ideas innovadoras y asumiendo riesgos que ayuden a transformar a la empresa por el bien común.
¿Cómo ha sido la evolución del negocio a lo largo de estos 50 años?
Desde nuestro nacimiento como agencia de seguros, fundada por mi padre, hasta la actual correduría hemos sido testigos de extraordinarios cambios cualitativos y cuantitativos, tanto a nivel sectorial como propio. La evolución en los últimos 30 años hacia la eficiencia ha sido constante y con importantísimos resultados. El seguro del automóvil ha ido perdiendo importancia frente a negocios donde se requiere de una mayor cualificación, las propias necesidades que la sociedad va creando se han ido traduciendo en la irrupción de novedosas soluciones aseguradoras cada vez más complejas, donde los canales profesionales disponemos de magníficas oportunidades para desarrollarnos.
Bajo su punto de vista, ¿cuáles han sido los principales factores que han contribuido a la evolución del sector?
La llegada en la década de los 80 de los ordenadores personales y el desarrollo en los 90 de software específico para distribuidores de seguros inició un potente cambio en nuestro sector, pero sin duda, el presente siglo con Internet como protagonista, trajo consigo un cambio radical en el panorama asegurador, su entrada en acción genera nuevos modelos de interacción, una nueva manera de hacer los negocios y también una nueva forma de comunicarnos. La competencia con la llegada de nuevos jugadores, los cambios regulatorios, el acceso a los datos y el uso de la Inteligencia Artificial nos obligan a ser cada vez más eficientes tecnológicamente para adaptarnos a los constantes cambios.
¿Serán estos mismos factores los que entren en juego en el futuro del sector o habrá otros?
Todos ellos están modificando el actual escenario, pero sin duda alguna la analítica de datos es el mayor disruptor de todos estos factores que afectarán de forma contundente al precio de los productos y al negocio asegurador en su conjunto.
Como miembro de la junta directiva de Cojebro desde hace muchos años, ¿qué aporta esta organización profesional a sus asociados?
Como asociación, Cojebro supone un punto de encuentro de profesionales que contribuye de forma dinámica a que nuestras corredurías sean sostenibles, mas competitivas y más rentables. Desde la asociación se facilita formación de alta calidad, el intercambio de conocimientos y experiencias entre los socios, información sectorial y defensa institucional.
Como organización empresarial permite compartir alianzas y proyectos comunes entre los socios y con otras organizaciones, unificación y optimización de recursos tecnológicos y acuerdos comerciales…, todo ello con el objetivo de ganar en eficiencia, ofrecer mejores servicios y aportar valor al cliente, lo que en definitiva se traduce en mayor rentabilidad para el socio.
¿Hacia dónde va Cojebro en esta nueva etapa? ¿Cuáles serán los aspectos en los que se trabajará principalmente?
Los nuevos retos del mercado exigen que centremos nuestros esfuerzos en priorizar en el desarrollo empresarial de las organizaciones de Cojebro con la concentración de servicios, desarrollos tecnológicos propios y estrategias comerciales comunes, poniendo el foco en ofrecer a los socios propuestas y soluciones que nos permitan ganar en dimensión, tanto de forma orgánica como inorgánica, ya sea en forma de alianzas o de integraciones, con el fin último de ganar en eficiencia y rentabilidad.
Por último, si tuviera que definir en pocas palabras los beneficios del asociacionismo para el sector, ¿cómo lo haría?
A lo largo de mi experiencia profesional, siempre he tenido claro que la pertenencia a una organización sectorial de carácter asociacionista es primordial en cualquier profesión. En una asociación compartes aspiraciones, problemas, actualidad, retos, se fomentan las relaciones y se forjan alianzas con personas u organizaciones con las que estás alineado, te formas y te mantienes informado, mejoras tu imagen y en definitiva te enriqueces, pero bien es cierto que los resultados y el éxito de las asociaciones se fundamenta necesariamente en la aportación de sus integrantes y es por ello que se necesita la implicación y el compromiso firme de todos y cada uno de los socios.